A Vane le gusta meter la mano en todo su coño… Bueno, la mano y el peine, el consolador, el vibrador y cualquier objeto que tenga a su alrededor. Excita ver a esta zorra dándolo todo, consiguiendo lo que más necesita constantemente: placer. Y es que ella a sí misma sabe lograr aquello que quiere conseguir, sin tener que recurrir a las pollas.