Cuantas secretarias de cuerpos increíbles estamos acostumbrados a ver a lo largo del día: mujeres que son bellas, perfectas y con unos cuerpos magníficos. Hoy os quiero presentar a la mía, pues tengo suerte de que aparte de ser una chica con un morbo increíble, también le gusta mucho follar con su jefe, que soy yo. Me he sorprendido bastante cuando he visto que se estaba quitando el uniforme… He pensado: «allá vamos a follar otra vez», pero esta vez la cosa ha empezado diferente porque me ha hecho una paja con los pies, algo que yo no me esperaba jamás. He dejado que me la haga y me he dado cuenta de que es una gran experta y que se puede sentir un placer increíble. Al acabar esta nueva forma de paja hemos terminado con lo clásico: conmigo follándole el coño encima de la mesa.