La verdad es que lo reconozco, cuando algo en el campo sexual me gusta, lo intento repetir cada vez que puedo, una y otra vez hasta que me canso y es que ahora me ha dado por follar con mi novia en la ducha sin parar… Me encanta verla mojada, apoyada sobre el cristal y sus tetas sacudiéndose al ritmo que le meto puntazos con mi polla. A decir verdad, es una sensación difícil de explicar pero que seguramente muchos de vosotros seáis capaces de comprender. Hoy ella me ha mandado una galería de fotos desnuda en la ducha. La quiero un montón porque sabe ponerme caliente con lo que a mí me gusta, piensa en mi y por eso me ha mandado todas las fotos, para que me pueda pajear pensando en ella y en la follada que le voy a meter sin pudor cuando llegue a casa y me la encuentre desnuda ahí mismo.