Esta sensual madura se llama Amalia, y no para de disfrutar exhibiéndose en la cama de su casa, mientras su vecino, que es fotógrafo, le hace un reportaje. Excita contemplar de qué manera contonea ese cuerpo prácticamente desnudo, y lo morbosos que son los guantes negros, pues le dan un toque de elegancia. Además, por si fuera poco, cuando descubre el chocho sale a la luz su secreto mejor guardado: ¡Tiene esta zona completamente repleta de vello, y se excita llevándola así!.