Esta preciosa rubia se está tomando un café en su oficina después de comer. De repente, entra un hombre en su despacho y empieza a darle besos en el cuello mientras acaricia todo su cuerpo. Resulta que es su jefe, pero además, también es su novio.

Le encanta venir a la tarde al despacho y darle un poco de placer a su novia. Por la tarde no hay casi nadie en la oficina, así que pueden hacerlo. Además, él es el jefe, así que puede hacer lo que quiera. Lentamente va desnudando a su preciosa novia y acaricia sus increíbles tetas, masajeándolas y pellizcando sus pezones para que se pongan bien duros. La rubia baja hasta su polla y empieza a comérsela, metiéndosela entera en la boca. Chupa con ganas y la empapa bien con su saliva para que deslice por todo su cuerpo. Su novio baja hasta su coño y lo lame muy despacio, notando cómo empieza a mojarse, lo que le pone cachondísimo. La abre de piernas en el sillón y le mete toda la polla dentro de ese coñito pequeño, follándolo duro, como a ella le gusta. La tumba de lado y le mete la polla en el culo y se lo rompe bien. Primero la folla despacio, pero poco a poco va aumentando el ritmo hasta correrse dentro.