Mi profesora particular se ha puesto muy cachonda cuando me estaba dando unas clases, y claro, no me ha quedado más remedio que tener que follármela sin parar de una manera brutal hasta el fondo del coño porque su culo me pone muy caliente. Desde el primer momento en que la vi entrar por la puerta me di cuenta de ello, del semejante culo que tenía la chica y cómo llamaba la atención sin parar, de cómo iba provocando hasta los límites más remotos. Es la típica madura que destaca por el gran cuerpo que tiene en general, pero sobre todo por tener unos cachetes del culo que son impresionantes y que a mí, por ejemplo, me han dejado sin aliento. Cuando le he podido meter la polla a cuatro patas me ha resultado una experiencia increíble.