Esta jovencita se lleva muy bien con su madre, son como mejores amigas. Un día se le ocurre preguntarle a su madre cómo se practica el sexo anal y la madre decide enseñarle a su hija. Le dice a su hija que llame a algún amigo suyo que les pueda ayudar y ella lo hace.

Al llegar el tío, las dos se ponen de rodillas delante de él, le sacan la polla del pantalón y empiezan a comérsela. La madre la agarra con la mano y la chupa, poniéndola muy dura. Quizás para ser un primer anal, la jovencita ha escogido una polla un poco grande. Entre las dos le hacen una buena mamada y le ponen muy cachondo. El tío pone a la jovencita a cuatro patas y empieza a frotar su ano, haciendo que se abra poco a poco. Cuando cede un poco, le mete los dedos dentro y los mueve, haciendo que se abra aún más. Poco a poco empieza a meterla la polla dentro del culito y a ella le encanta. No para de gemir y gritar de placer hasta que se la mete entera dentro de su culazo. La jovencita se pone encima de él y le cabalga, saltando encima de su polla mientras frota sus pezones contra su boca. El tío acaba poniéndola de rodillas y se corre por toda su carita.