Esta hija parece que ha decidido comerle la polla al padre de una manera brutal, en la cocina y metiéndosela hasta el fondo de la garganta. No sé por qué lo ha hecho, pero parece que a la chica le ha puesto muy caliente eso de poder comerle el rabo a su propio padre, el que lo ha gozado de una manera brutal mientras la chica estaba chupándole la polla sin parar y atragantándose y escupiendo saliva mientras le chupaba la polla al máximo, sin parar. Es la típica jovencita que te entra por los ojos, esa teenager con cara preciosa y un culo bastante rico bien listo para que se lo follen sin parar y para que vaya vestida con ropa provocadora, como suelen hacer ahora la mayoría. Después, cuando le chupa la polla es la hora de meterla por ese coñito tan agradable.